El ginseng coreano (Panax ginseng) es una planta que podemos consumir por sus bondades adaptógenas, pero ¿qué es un adaptógeno? Son aquellas sustancias que tienen la capacidad de mejorar los síntomas de estrés y fatiga ayudando al organismo a adaptarse a la situación. Por ello, se mejora el rendimiento mental y físico, es decir, aumenta la resistencia no específica en momentos de sobreesfuerzo. Seguro que lo relacionas con temporadas de otoño y cambios de estación.

Pero no nos quedemos solo con “me ayuda a estar más despierto/a”, vamos a desgranar cómo actúa el ginseng y cuáles son esas ayudas que aporta esta interesante planta. Lo hace de diferentes formas:

• En el Sistema Nervioso Central (SNC): mejora la resistencia a la fatiga, así como al estrés, mejorando la memoria. Más claramente, favorece los procesos cognitivos facilitándolos (nos “aclara” la mente) de manera que son mucho más evitables los estados de ansiedad. Muchas personas con trabajos que requieren más concentración, decisiones, momentos de estrés… lo toman para mejorar y optimizar el desarrollo de sus actividades. También actúa sobre la neurodegeneración (favorece la salud de nuestras neuronas) de manera que parece ser una buena ayuda para la prevención del Alzheimer.

• Sistema inmunitario: el ginseng también favorece el trabajo de nuestras células inmunitarias, concretamente la quimiotaxis (que nuestra célula defensora se mueva hacia el virus o bacteria), la fagocitosis (que nuestra célula defensora engulla al agresor), y el aumento de linfocitos y anticuerpos (responsables del buen funcionamiento defensor). Incluso se ha mostrado mayor actividad en las famosas células natural killers, aquellas que destruyen células potencialmente cancerígenas.

• Sistema cardiovascular: el consumo de ginseng tiene efecto hipotensor (reduce la presión arterial) pero en sus dosis adecuadas. Su fama afrodisíaca puede deberse a la vasodilatación de los cuerpos cavernosos y su mejor entrada de sangre. 

• Gastrointestinal: posee un efecto protector estomacal porque ayuda a producir más mucus, el cual protege las paredes del estómago y nos previene de úlceras y gastritis. Así mismo, puede ayudar, aunque ligeramente, a combatir el Helycobacter pylori.

• Metabolismo: se muestra útil en la diabetes tipo 2, por su acción hipoglucemiante.

• Sangre, sistema hemático: es un anticoagulante natural. También ayuda a disminuir los triglicéridos y aumenta el colesterol bueno (HDL).

• Antirradicales libres: es un buen detoxificante porque capta radicales libres de los tejidos, sobre todo en el hígado.

Una buena manera de consumirlo es con Jalea Real, sobre todo en esta época de vuelta a la rutina y próximo cambio de estación, pues consumirlos juntos aporta vitaminas del grupo B que nos ayudan a conseguir un efecto estimulante y tónico en general. 

Efectos secundarios

Es conveniente realizar descansos pues su consumo a largo plazo puede provocar hipertensión, nerviosismo, insomnio o hemorragias. 

Tampoco se recomienda en situaciones en las que se quiere evitar el exceso de estrógenos, como el cáncer de mama, endometriosis o miomas, ya que tiene efectos sobre el sistema endocrino. 

Contraindicaciones

Está contraindicado en personas que se medican para afecciones cardíacas, antidepresivos (IMAO) o anticoagulantes.

¿Para quién está indicado?

Según la OMS, son candidatas aquellas personas que tienen fatiga y debilidad, dificultades para concentrarse en épocas concretas, estudiantes en período de mayor exigencia y durante la convalecencia.

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Referencias bibliográficas

Villar, A. M; Naval, M. V., Gómez-Serranillos, M.P. (2003). Ginseng Revisión. Departamento de Farmacología. 16(10).
Immunomodulatory Response Induced by Ginseng. (2003). Journal of Ginseng Research, 27(3), 115–119. https://doi.org/10.5142/jgr.2003.27.3.115