Recomendaciones para afrontar el cambio de hora
Se aproxima el día en que tendremos que cambiar la hora de nuestros relojes para adaptarnos al horario de verano. Por mucho que queramos pensar que siguiendo la misma rutina todo se va a restablecer en un día, esto difícilmente sucede. La adaptación suele ser algo progresivo que, en muchas ocasiones, requiere de ayuda. Hoy te brindamos algunas recomendaciones para afrontar el cambio de hora.
El cambio de hora varía nuestros ciclos circadianos mediante una alteración en la secreción de melatonina, la hormona que actúa regulando los estados de vigilia y sueño en función de la presencia o ausencia de luz solar. Por eso, es fácil que durante los próximos días tengamos más sueño de lo normal cuando aún estemos activos, un efecto similar al que se produce con el jet-lag cuando viajamos en avión a un país con una zona horaria diferente.
Aunque el cambio de hora se hace siempre en la noche de un fin de semana para que sea más llevadero, puede provocar alteraciones del sueño, del estado de ánimo e incluso del apetito, y hay personas más sensibles que otras.
A quienes más afecta es a los niños y a los mayores, ya que tienen una mayor sensibilidad ante los cambios hormonales y suelen seguir rutinas estrictas que hacen sus días predecibles, y eso les da seguridad. Además, para ellos, una hora parece un periodo de tiempo mucho más largo. Para sobrellevarlo, lo mejor es tener un poco más de paciencia de la habitual e intentar mantener las rutinas horarias normales. Otro grupo de la población especialmente afectado es el de las mujeres en la etapa de la menopausia, ya que experimentan una mayor fluctuación hormonal de por sí.
En unos días solemos adaptarnos al cambio
Por suerte, no deja de ser un trastorno leve que no supone mayores problemas hasta que se regulan nuevamente los ritmos circadianos. Para conseguirlo de la mejor manera, es básico establecer horarios fijos para dormir y despertarnos, evitar hacer la siesta durante esos días y elegir alimentos ligeros y bajos en grasas saturadas/azúcares simples para cenar. También nos ayudará tomar después de cenar 1 o 2 comprimidos de Triptófano con melatonina, Magnesio y Vit. B6 de Ana Maria Lajusticia®, complemento nutricional que ayuda al equilibrio emocional y a regular el reloj interno del cuerpo, facilitando el descanso nocturno.
En cuanto al ejercicio, lo ideal es practicarlo varias horas antes de dormir, ya que la actividad física intensa puede producir excitación e insomnio. Si tomamos algún tipo de suplementación deportiva con cafeína, procurar hacerlo a primera hora de la mañana o reducir su consumo durante esos días. Y, al acostarnos, evitar siempre las luces brillantes de los dispositivos electrónicos un rato antes de dormir.
Y si estás pensando en viajar, no te pierdas este artículo: «Viajes y entrenamiento»